El Arsenal afianzó su liderato en el grupo H de la Liga de Campeones tras darse un festín de goles (5-1) ante el Shakhtar Donetsk en un duelo de intensidad creciente para el que regresó tras un mes de baja el capitán Cesc Fábregas, que dedicó un gol marcado de penalti a su madre.
Mientras el conjunto visitante esperaba a ver qué pasaba, el Arsenal fue efectivo y supo aprovechar las grietas del Shakhtar, que se mostró sólido especialmente en los primeros veinte minutos, hasta el primer tanto de los "Gunners".
Un balón suelto entre portero y jugador cayó en los pies del camerunés Alex Song que, tras un control muy habilidoso, la colocó entre las redes de Pyatov.
A partir de ese momento, la presión del Arsenal aumentó al tiempo que el Shakhtar, entrenado por Lucescu, jugaba en el centro del campo sin llegar a avanzar demasiado.
El combinado de Arsene Wenger, quien cumplió este mes catorce años al frente de la plantilla, se benefició además de la vuelta de Fábregas, que disputó hoy su primer partido tras la lesión muscular sufrida el 18 de septiembre en un partido de liga contra el Sunderland y que lo obligó a perderse la anterior cita de 'Champions' contra el Partizan de Belgrado, con victoria para su equipo por 1-3.
Con los tres puntos conseguidos en su viaje a Serbia y el contundente triunfo ante el Braga de Portugal (6-0) a mediados de septiembre, el combinado londinense llegó al duelo de esta noche como favorito, pese a que su rival tenía acumuladas también dos victorias y, por tanto, los mismos puntos que ellos -seis-.
Aunque el entrenador galo expresó el lunes serias dudas sobre el campeón del mundo, que según dijo se encontraba aún un poco bajo tras ausentarse de cuatro encuentros con su equipo y de dos con "La Roja", finalmente Wenger decidió arriesgar y sacó al centrocampista de titular.
Mientras Cesc buscaba la manera de repetir su gran contribución -con dos de los seis goles- de la primera jornada en la Liga de Campeones (contra el Braga), Nasri supo definir y aumentar distancias antes de ir al descanso.
En el minuto 42, el francés recibió un centro de Ebou, que controló mientras se acomodaba para ejecutar un disparo con la izquierda, que dio el segundo gol al Arsenal.
Tras la reanudación, el Shakhtar Donetsk tuvo su mejor opción, de la mano del brasileño Luiz Adriano, pero destacó con su gran despeje Fabianski, el hombre que reemplaza en la portería del Arsenal desde hace unas semanas al español Manuel Almunia, afectado de una lesión en el codo.
Pronto el encuentro se puso completamente del lado de los locales, con un penalti a su favor en el minuto 60, que permitió a Fábregas cumplir su deseo de justo antes de ser sustituido por Denilson.
Pese a no haber ofrecido su más brillante actuación, estuvo acertado en la ejecución de ese penalti, que supuso una cartulina amarilla para el brasileño del Shakhtar Adriano, y dedicó ese tercer tanto para el Arsenal a su madre con un mensaje en su camiseta interior, que decía en catalán: "felicitats mamá".
Se podría decir que la segunda parte del encuentro fue la fiesta del Emirates. En el primer tiempo, el Arsenal había sido efectivo pero no brillante. Sin embargo, conforme avanzaba el reloj los "cañoneros" tomaban más el control y jugaban a su antojo.
Así llegaron el cuarto y quinto gol -en menos de tres minutos-, a cargo del inglés Jack Wilshere (con la izquierda) y del joven marroquí Marouane Chamakh, respectivamente.
Lo mejor que consiguió el conjunto ucraniano en su visita al Reino Unido fue no dejar a cero su marcador, gracias un tanto firmado por el brasileño nacionalizado en Croacia Eduardo, jugador del Arsenal hasta el pasado verano, que fue aplaudido hoy por la afición de Londres.
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